Zully Angeles - 18/01/2025
Tras perder el Combate Tribal contra Roman Reigns hace unos días en el estreno de Raw en Netflix, Solo Sikoa se presentó en la más reciente edición de SmackDown con la intención de hablar sobre sus próximos pasos. Sin embargo, su comportamiento dejó más preguntas que respuestas, generando incertidumbre sobre el rumbo del nuevo The Bloodline.
Jacob Fatu tomó el micrófono primero, exigiendo silencio para que Solo pudiera hablar. Pero cuando Sikoa subió al ring, dudó en decir algo y simplemente dejó caer el micrófono antes de retirarse hacia backstage. Su salida dejó a Jacob y a Tama Tonga visiblemente desconcertados, mientras los abucheos del público no cesaban.
Frustrado, Fatu retomó el micrófono para expresar su enojo. Afirmó estar cansado de la falta de respeto del público, dejando en claro que no le importaba si lo abucheaban o lo aplaudían, ya que apenas estaba comenzando, y advirtió que lo que han visto de él hasta ahora no es nada comparado con lo que está por venir.
La música de LA Knight sonó, y el ex campeón apareció sorpresivamente para atacar a Fatu y Tama por la espalda. Aunque inicialmente tomó el control, la superioridad numérica pronto lo superó. Cuando parecía que todo estaba perdido, Braun Strowman hizo su entrada y neutralizó a Tama Tonga en ringside.
Strowman entró al ring y se encaró con Fatu, pero antes de que pudiera enfrentarlo, Tama intervino y sacó a su compañero del cuadrilátero y ambos se retiraron hacia backstage. Ahora con Solo Sikoa manteniéndose alejado del grupo y las tensiones evidentes, el futuro del renovado The Bloodline queda en duda, especialmente en cuanto al papel que jugará Solo en adelante.