Zully Angeles - 30/10/2025
AEW celebró esta noche una edición especial de Dynamite, titulada Fright Night, que continuó impulsando las rivalidades de cara a Full Gear. Uno de los momentos más destacados fue la confirmación de que el próximo evento incluirá no solo una edición femenina de Blood and Guts, sino también una masculina: Darby Allin unirá fuerzas con The Conglomeration para enfrentarse a The Death Riders dentro de la imponente jaula.
El combate entre Jon Moxley y Kyle O'Reilly fue intenso y brutal. Moxley sacó pronto a O'Reilly del ring para estrellarlo contra la mesa de comentaristas y aplastar su mano con la tapa, castigando la extremidad. A pesar de la ofensiva, O'Reilly respondió con múltiples llaves de sumisión, incluyendo un Achilles Lock, mientras que Moxley replicaba con Piledrivers y Crossfaces.
El brutal intercambio de golpes y sumisiones no pudo tener un ganador. Después de que Moxley lograra revertir un Ankle Lock de O'Reilly y este último lo atrapara en un Guillotine Lock en ringside, el árbitro llegó a la cuenta de diez. El combate terminó en empate por conteo fuera del ring, pero el caos apenas comenzaba: Marina Shafir atacó a la réferi, y Claudio Castagnoli se unió a Moxley para lanzar un Uppercut a O'Reilly, iniciando una paliza de los Death Riders.
La situación fue controlada por la intervención de Roderick Strong, seguido por Darby Allin, Mark Briscoe y Orange Cassidy, quienes ahuyentaron a los atacantes. Con los grupos enfrentados, Darby Allin tomó el micrófono y declaró que la rivalidad debía terminar de una vez, desafiando a sus rivales. La respuesta a la disputa la dio Orange Cassidy, con una simple frase: "Uhh... Blood & Guts", confirmando el brutal encuentro para la edición de Dynamite del 12 de noviembre.