Sebastián Martínez - 26/11/2025
Bret Hart ha sido noticia en las últimas semanas por sus últimas declaraciones en apariciones públicas, especialmente cuando critica a otros luchadores. En la última edición del podcast Hall of Fame, Booker T reaccionó a la reciente entrevista de Hart en Montreal, publicada por The Johnny Pro Show, donde el canadiense volvió a cargar con fuerza contra Goldberg, generando titulares como suele ocurrir cada vez que habla.
Booker T admitió que le cuesta comprender por qué, a estas alturas, Bret parece hablar desde un lugar de resentimiento. "Bret Hart ha estado por todas partes últimamente. Y ni siquiera sé qué le pasa. Me gusta Bret Hart, ha hecho muchísimo por este negocio, pero ahora parece que todo es terrible, como si quisiera quemarlo todo. Y no entiendo por qué".
El miembro del Salón de la Fama reconoció que las heridas de Hart con Goldberg están profundamente marcadas por el incidente de Starrcade 1999, donde el botch de una patada derivó en la lesión cerebral que puso fin a la carrera del canadiense. Aun así, quiso recordar que los accidentes en el ring, por dolorosos que sean, forman parte del riesgo del oficio.
"Lo que pasa en el ring, pasa. Ninguno de nosotros sale ahí fuera a intentar herir a alguien a propósito", señaló Booker, reiterando que los luchadores rara vez actúan con mala intención.
El propio Booker también ha sido blanco de Hart recientemente, cuando éste calificó su Axe Kick de peligroso durante una firma virtual, algo que el texano no ha olvidado. Booker T quiso remarcar que no reconoce al Bret Hart que está haciendo estas críticas. “Creo que Bret Hart es una persona mucho mejor que este que está en los podcasts diciendo todo lo que dice últimamente. Algunas cosas, sencillamente, ya no se pueden deshacer", añadió.
En la entrevista de Johnny I Pro Show, Hart volvió a cargar contra Goldberg comparándolo con Brock Lesnar, a quien considera un profesional ejemplar, y reiteró que el wrestling moderno le parece demasiado “falso” para disfrutarlo. Unas declaraciones que, para Booker, reabren heridas pero no aportan a un legado que, según él, debería hablar por sí solo.