CAMPEONATO DE WWE
AJ Styles (c) vs. Shinsuke Nakamura.
Buen combate, mejor que el de WrestleMania, aunque a un nivel inferior que el que ambos sostuvieron en Wrestle Kingdom. Y parte de esa mejoría en la performance vino producida por el público árabe, que desde un principio se mostró interesado en el enfrentamiento, coreando al campeón y abucheando al asiático. En líneas generales, se sintió una pelea más fluida, con más alma que la del magno evento, donde se vió una consecución de spots bien ejecutados, pero no había una historia principal sobre la cual estructurar la lucha. Aquí se transmitió un mayor odio, algo que mejoró sensiblemente el desarrollo del combate, sobre todo en las fases de dominio de Nakamura. Ambos lucieron a una misma altura, aprovechando sus momentos y debilitando a su rival poco a poco, incrementando el ritmo del match, que fue de menos a más, aunque estuvo entretenido en todo momento. Hubo momentos que no me gustaron mucho, como alguna ejecución algo sucia o el enésimo low-blow de Shinsuke, un recurso que es llamativo, pero empieza a verse forzado al tener que incluirlo en la lucha si o si.
No obstante, estaba siendo un combate muy disfrutable hasta la fase final, en la que se produjo una doble cuenta fuera del ring, dando lugar a un empate y a la retención del título por parte de AJ. Por buscar lo positivo, se vió a un Styles más agresivo, cansado del nipón y con ganas de venganza, con un odio personal más allá del propio campeonato, lo cual enriquece la storyline. Además, se aplaza para Backlash la coronación del japonés o la venganza completa del norteamericano, ya que el ataque fue contundente, pero no definitivo, basado en un par de saltos y un sillazo. Pero estaba siendo una buena lucha y esto no deja de ser un PPV, por lo que un final tan polémico se ve bastante feo. Es más entendible en un semanal, pero en estas circunstancias, las descalificaciones o cuentas fuera del ring, restan bastante a la performance en general. Buena lucha con mal final.
Nota: 7.
COMBATE DE ATAÚDES
The Undertaker vs. Rusev.
Visto lo que le pasó a John Cena en WrestleMania, el estado físico de Undertaker y el status de Rusev, esperaba un squash de una cortísima duración y que se produjera un enterramiento del búlgaro, tanto en la propia lucha, como en sentido figurado, para su personaje. Sin embargo, nos ofrecieron una performance digna, con un público metido, ya que el Enterrador sigue siendo una leyenda viviente. Aunque no fue la quinta esencia del wrestling, al menos cumplió con el expediente y no dejó mal sabor de boca. El Deadman se mostró tremendamente superior, como era lógico, y parecía haber despachado a su rival con facilidad, sin haber recibido castigo, tras aplicar sus movimientos de firma clásicos. Pero ahí apareció Aiden, para evitar que cerrase el ataúd en primer término y provocar una recuperación de su compañero.
Rusev lució en esa fase bastante bien, aunque su derrota era obvia. Castigó a Taker, que resistió como pudo y tuvo una ofensiva bastante creible. Hasta que tras un Accolade, el Phenom se levantó y decidió que se había acabado la historia, machacándolo tanto a él como a English y cerrando el ataúd con ambos en su interior. Los puntos negativos de la ejecución estuvieron en el excesivo tiempo que Rusev estuvo esperando sin moverse a su compañero, lo cual le quita la fortaleza que había intentado demostrar minutos antes y la peligrosidad del tombstone de Undertaker a Aiden. Lo noté un poco inseguro, algo normal por sus rodillas y, aunque es un move que debe hacerse por lo que significa, creo fue bastante arriesgado de la manera que se produjo. En definitiva, un combate muy simple, con partes muy diferenciadas y un resultado muy predecible, pero que tuvo algún destello que no dejó muy mal al búlgaro.
Nota: 5,5.
COMBATE DE JAULA DE ACERO POR EL CAMPEONATO UNIVERSAL
Brock Lesnar (c) vs. Roman Reigns.
Ejemplo de como bookear un combate con un potencial enorme para decepcionar a gran parte de los fans. La estipulación steel cage siempre tiene ese aliciente de la dureza y la imprevisibilidad que despierta hype por si mismo y la historia de superación de Reigns debería tener su culminación aqui, ya que no lo tuvo en WrestleMania. Pues nada de nada, aderezado además con un final muy malo en cuanto a lógica. El desarrollo de la lucha se convirtió en un spotfest en el que solo veiamos el superman punch y la spear por un lado, y el F-5 y el german suplex, por el otro. Está bien que sean sus movimientos más potentes, pero es que parece que no puedan hacer mas cosas, que no tengan recursos, que no sean capaces de innovar nada, cuando son dos wrestlers que tienen más cualidades que las que muestran. El problema es que con tanta resistencia de uno y otro a esos finishers, más que conseguir el efecto de verlos como poderosas bestias que aguantan todo, lo que se acaba por hacer es devaluar a los propios movimientos.
La lucha fue corta, la jaula apenas se utilizó, excepto un portazo de Heyman y alguna escalada, viendo continuamente un spotfest, hasta que nos encontramos con el final. Un final horrible, pese a lo espectacular de ver al cuerpo de Brock atravesar la pared de la celda en una lanza muy bien hecha por Roman. Y es que en un nuevo botch bastante notable, se vió como daban la victoria a Brock, cuando Reigns fue el ganador legal de la lucha. No sé si fue algo premeditado, para tener una excusa en el futuro con la que estirar el chicle y que haya una reclamación que justifique repetir este combate o, directamente, es que la cosa salió mal, pero el ganador real fue el samoano, aunque nos vendan lo contrario.
Las reglas dicen que para conseguir el triunfo, además de por pinfall, se debe salir de la estructura y poner ambos pies en el suelo. Lesnar cayó antes que su rival, pero sobre la verja, lo cual equivale a una salvada de Kofi o a quedarse descolgado en el exterior de la jaula sin lanzarse al suelo. Brock se quedó ahi y Roman pisó claramente el ringside. Nuevo mal final, como el del título WWE, pero esta vez, además, tras una lucha que dejó bastante que desear.
Nota: 2,5.