Finaliza el juicio de la demanda contra WWE por un accidente de tráfico
El Tribunal de Distrito Medio de Florida sentencia a WWE a pagar 331.800 dólares a Jackson Parsons por negligencia
El jurado dictamina que ambas partes fueron responsables del accidente

En junio de 2021, Jackson Parsons, un ciudadano de Tampa (Florida), presentó una demanda contra WWE por un accidente de tráfico en el que estuvo implicado. Finalmente, a principios de esta semana, tuvo lugar un juicio con jurado ante el Tribunal de Distrito Medio de Florida, que dictaminó una curiosa resolución, según ha informado PWInsider.
Parsons alegó que el 22 de julio de 2019 en Tampa, una furgoneta alquilada por WWE estaba siendo conducida por un empleado de la empresa, Gaitan Thomas, "que estaba en el trabajo en ese momento". La furgoneta estuvo involucrada en un accidente de tráfico con Parsons, que estaba montando una bicicleta en ese momento. Thomas trabaja como experto en utilería para WWE. Los archivos legales de la compañía en el caso han descrito a Thomas como "un contratista independiente contratado" por la empresa.
En su presentación, Parsons alegó que tendrá problemas permanentes debido al accidente, citando que "ha sufrido lesiones físicas, dolor y sufrimiento, incapacidad y pérdida de la capacidad para llevar y disfrutar de una vida normal, molestias, desfiguración, cicatrices y angustia mental". Además, afirma que sus lesiones y sufrimiento son permanentes, que ha incurrido en gastos médicos pasados y que incurrirá en gastos médicos futuros a causa del accidente de automóvil, y que también ha sufrido "una pérdida de ingresos y capacidad de ganancia, tanto en el pasado como en el futuro". Cabe señala que los expedientes judiciales indican que Jackson fue operado de una lesión en el tobillo tras el incidente de tráfico.
En su demanda, Parsons declaró que ha perdido la calidad de vida que buscaba al trasladarse a Florida y señaló que los gastos médicos pasados derivados del accidente ya ascienden a 171.430,38 dólares. Citó una pérdida de ingresos, pasados y futuros, estimada en 75,036-100,048 dólares y calculó sus gastos médicos futuros en la cantidad de 314,850 dólares. La demanda también solicita 76.500 dólares por el dolor y el sufrimiento, la angustia mental y las molestias de Parsons, así como 401.500 dólares por el dolor y el sufrimiento futuros. Los archivos de la corte declararon que en diciembre de 2020, Parsons exigió una demanda de acuerdo, por escrito, por la cantidad de 1.064.328,38 dólares, un cifra que ha quedado lejos de la cantidad fallada por el tribunal.
El caso se presentó ante el jurado a finales de febrero. El 3 de marzo, éste dictaminó que la negligencia de WWE provocó las lesiones de Jackson, pero que la propia negligencia de Jackson fue un factor para que se produjera el incidente. El jurado decidió que Jackson era responsable del 65% de la negligencia, mientras que WWE era responsable del 35% restante.
El jurado totalizó los daños de Parson en 948.000 dólares. Sin embargo, el tribunal ordenó a WWE pagar a Jackson 331.800 dólares, un porcentaje basado en su propio nivel de negligencia en el incidente. Tras esta decisión, el tribunal cerró oficialmente el caso el 7 de marzo.