Tammy "Sunny" Sytch fue una de las mujeres más deseadas de WWF/WWE en la década de los 90. "Sunny" ejerció como manager, comentarista y reportera en backstage, siendo además considerada como una de las primeras "Divas" de la empresa. Sin embargo, también fue protagonista de muchos problemas en bastidores debido a una vida personal desordenada y al abuso de sustancias.
Sus problemas la acompañaron incluso después de dejar la compañía, siendo arrestada en multitud de ocasiones en estado de embriaguez, e incluso llamó la atención de los fans cuando afirmó que vendería su anillo del WWE Hall of Fame o su participación en una película para adultos. Sin embargo, todavía quedan historias que no han sido reveladas al público.
Jim Ross, el legendario comentarista, relató una de estas historias durante la más reciente edición de su podcast Grilling Jr., revelando que Sytch se ofreció a vivir con él en Oklahoma después de que su esposa (Jan) falleciera en 2017.
"Ella tuvo ruptura tras ruptura tras ruptura. Se buscó muchos de estos problemas ella misma. Recuerdo que una vez me propuso mudarse conmigo a Oklahoma", dijo Ross. "'Sí, soy una buena novia. Sé cocinar. Te cuidaré en la cama. Bla, bla, bla, y podemos pasarlo muy bien'. "Lo pensé durante 10 segundos. Pero de ninguna manera".
"Puedo ser ingenuo, solitario y tener el corazón roto, pero maldita sea, ya he pasado por eso. Ya vi lo que ella era, y no iba a meterme en el aspecto dramático de mi vida, y estoy tan seguro como contento de no haberlo hecho. Un trasero es solo un trasero. Qué demonios. No vale la pena... esquivé aquella bala. Te lo prometo", concluyó.
Actualmente, Sytch cumple condena después de provocar un accidente de tráfico que costó la vida a un conductor. La ex superestrella de WWE fue condenada a 25 años de prisión (8 de ellos en libertad condicional), además de ser declarada como un "peligro para la sociedad" debido a sus numerosos y continuos problemas con el alcoholismo y la ley.