La controversia que rodea a Vince McMahon no deja de intensificarse tras el acuerdo de 1,7 millones de dólares alcanzado con la Comisión de Bolsa y Valores (SEC). Aunque McMahon calificó públicamente las acusaciones como “simples errores contables,” la abogada de Janel Grant, Ann Callis, ha sido contundente en su respuesta, afirmando que la investigación criminal contra él está lejos de cerrarse.
Ann Callis, representante legal de Grant, compartió una declaración en Internet, en la que acusa a McMahon de violar la ley de manera sistemática para ocultar sus acciones. “Durante su liderazgo en WWE, Vince McMahon actuó como si estuviera por encima de las normas, y ahora sabemos que infringió la ley repetidamente para encubrir su conducta espantosa, incluido el tráfico humano,” expresó Callis.
Callis también destacó la gravedad del caso, señalando: “Los cargos de la SEC demuestran que el acuerdo de confidencialidad que Vince McMahon forzó a la Sra. Grant a firmar es ilegal, por lo que su caso debe ser juzgado en los tribunales. Mientras los fiscales del Distrito Sur de Nueva York avanzan con su investigación criminal, estamos preparados para presentar nuevas evidencias en nuestro caso civil sobre la explotación sexual que sufrió la Sra. Grant en WWE a manos de Vince McMahon y John Laurinaitis.”
En enero de 2024, Grant interpuso una demanda federal acusando a McMahon y al exejecutivo de WWE John Laurinaitis de tráfico y abuso sexual. La demanda asegura que ambos la agredieron en las oficinas centrales de WWE. Por su parte, McMahon y Laurinaitis intentan que el caso pase de los tribunales públicos a un arbitraje privado, basándose en una cláusula del acuerdo que Grant firmó bajo presión.
Estas declaraciones de Callis añaden presión al caso, especialmente tras revelarse en los documentos de WWE presentados a la SEC un patrón de pagos secretos para silenciar otras denuncias. Además del caso de Grant, McMahon habría pactado dos acuerdos más de un millón de dólares con exempleados en 2006 y 2008 para evitar acusaciones contra él y la compañía. También se descubrieron pagos no declarados por un total de 5 millones de dólares, relacionados con las apariciones de Donald Trump en WWE en 2007 y 2009.
Las acusaciones del pasado siguen siendo un lastre para McMahon. En 2023, se dio a conocer que llegó a un acuerdo millonario con la exárbitra de WWF Rita Chatterton, quien lo acusó de violación en 1986. Estos incidentes, junto con la investigación en curso, continúan afectando el legado de McMahon y generan dudas sobre su responsabilidad legal.
Con las batallas judiciales aún abiertas, Callis y su equipo están decididos a buscar justicia. Sea en tribunales públicos o en un arbitraje privado, la creciente cantidad de pruebas apunta a que esta historia no ha llegado a su fin.