Durante la reciente edición de WWE SmackDown, Solo Sikoa hizo su regreso a la marca azul. Sin embargo, las tensiones entre él y sus compañeros Jacob Fatu y Tama Tonga escalaron rápidamente. El show comenzó con el Campeón Indiscutido, Cody Rhodes, hablando sobre su próximo rival, confirmado que ahora que Jey Uso eligió a Gunther, el ganador de Elimination Chamber será su oponente en WrestleMania.
Sin embargo su discurso fue interrumpido rápidamente por Drew McIntyre, y después por Jacob Fatu y Tama Tonga. Fatu comenzó advirtiéndole a Rhodes que llegará a WrestleMania y recuperará el título que nunca debió haber salido de su familia. Pero la situación cambió cuando en la pantalla se mostró la llegada de Solo Sikoa al recinto, lo que hizo que Jacob y Tama fueran a buscarlo.
Cuando finalmente lo encontraron, Fatu, furioso, le exigió respuestas a Sikoa, quien explicó que necesitaba alejarse un tiempo para reflexionar tras haber perdido el Ula Fala. Sikoa continuó diciendo que ahora, se sentía listo para regresar y recuperar el poder, pero para lograrlo, debían hacerlo juntos.
Sikoa le dijo a Fatu que debía ganar esta noche y recuperar el Campeonato Indiscutido en WrestleMania para la familia. Cuando Fatu trató de marcharse, Solo lo detuvo y le dijo: "Jacob, te quiero". Pero Fatu lo miró por un momento y se marchó sin decir palabra alguna.
Durante el evento estelar de SmackDown, Jacob Fatu se enfrentó a Braun Strowman y Damian Priest en busca de un lugar en Elimination Chamber. Sin embargo, en los momentos finales, Solo Sikoa apareció para intentar ayudar a Jacob, pero Cody Rhodes también irrumpió, lo que causó que Sikoa golpeara por error a Tama Tonga. Esta distracción enfureció a Jacob, sacándolo de la acción en el ring y permitiendo que Damian Priest aprovechara la situación para derrotar a Strowman y asegurar su clasificación, dejando las cosas muy tensas entre los miembros de The Bloodline.