La leyenda de ECW, The Sandman, habló recientemente sobre su experiencia negativa en WWE durante su participación en el podcast '1 of a Kind' con RVD. El ícono de la lucha libre hardcore, conocido por su personalidad de bebedor de cerveza y su estilo de kendo, reveló que su tiempo en WWE fue todo menos agradable, calificándolo de "desgarrador y agotador".
Sandman explicó que si bien ECW era la más divertida, TNA el trabajo más rentable y WWE era la más lucrativa, pero también la más frustrante. Compartió que la estructura corporativa y el ambiente tras bambalinas de WWE lo hacían sentir miserable, afirmando que le daba pavor viajar a los shows y estar en los vestuarios.
"Me encanta el negocio, hasta que tuve que ir a WWE. Después de pasar mi primera semana allí, pensé: 'Me voy a matar, tío. Si no hubiera tenido a un par de mis amigos conmigo...'", admitió el cinco veces campeón de ECW
The Sandman era conocido por su icónica entrada, al ritmo de los riffs de "Enter Sandman" de Metallica. Su entrada se vio realzada por su conexión con el público y su habilidad para beber. Sin embargo, su entrada se redujo en WWE sin la música de Metallica y no le dejaron beber cerveza, siendo una de sus mayores frustraciones.
Antes de SummerSlam 2006, le dijeron al luchador que ya no podía beber cerveza en televisión, lo que luego descubrió que era porque WWE quería proteger el personaje de Steve Austin. Esta decisión dejó a Sandman sintiéndose despojado de su identidad en el ring.
"Johnny (Laurinaitis) me llama a su oficina y me dice: 'Ya no puedes beber cerveza'. Y yo le digo: '¡¿Qué?!'". Más tarde se dio cuenta de que WWE quería proteger el personaje de Steve Austin para beber cerveza. "En ese momento odiaba estar allí. Había perdido la esencia de mi personaje. Era un suplicio", declaró The Sandman.
También recordó el ambiente abrumador de WWE, mencionando que a menudo había más de 100 luchadores tras bambalinas, pero solo unos pocos aparecían en los shows. Prefería vestirse en las escaleras con Sabu para evitar los vestuarios abarrotados de luchadores.
"Había cien chicos ahí en RAW, y solo estaban usando a 30. No puedo estar en ese vestuario pisoteando a la gente y que todos te mientan en la cara. La verdad es que mi época en WWE fue agotadora. Odiaba trabajar en WWE", aseguró la leyenda de ECW.
Finalmente, The Sandman admitió que estaba tan descontento en WWE que acortaba sus combates a propósito para irse antes de la arena. Su tiempo en la compañía terminó tras conflictos con la gerencia, dejando claro que WWE nunca fue la opción adecuada para él.
“Terminaba antes mis luchas para largarme a mi casa. Tuvieron que decirme que dejara de hacer eso, de irme a casa temprano. Entraba, les daba cinco minutos en el ring y salía, así lo hice durante un tiempo”, concluyó el veterano exluchador.
La carrera de The Sandman en WWE duró aproximadamente 15 meses. Si bien su tiempo en WWE fue relativamente corto en comparación con su legendaria etapa en ECW. Tras su salida de WWE, The Sandman regresó al circuito de lucha libre independiente, donde siguió haciendo apariciones hasta el año 2020.
