All Elite Wrestling ha sido profundamente escrutada desde el mismo momento en que irrumpió en el negocio de la lucha libre profesional. Dejando de lado la contratación de talentos o las polémicas en backstage, uno de los temas más comentados sigue girando en torno a los ratings cosechados por los shows televisivos de la compañía.
Si bien la empresa comenzó con buen pie, venciendo a NXT en las denominadas "Wednesday Night Wars", lo cierto es que su audiencia ha ido disminuyendo con el tiempo, pasando del millón de espectadores a los 650.000 de media que registra actualmente su principal programa, AEW Dynamite.
A pesar de todo, All Elite Wrestling renovó su acuerdo con Warner Bros Discovery, reforzando su presencia en la misma a través de Max, plataforma en la que actualmente también pueden seguirse los shows semanales de la empresa. Tony Khan y algunos directivos de WBD han reiterado en varias ocasiones que están satisfechos con esta colaboración, asegurando que los índices de audiencia no preocupan a la compañía multinacional.
Así lo explicaba Andrew Zarian en la más reciente edición de su podcast Beyond The Bell, donde aseguró que a los directivos de Warner Bros Discovery no les importa lo más mínimo los comentarios en Internet sobre los datos de audiencia de los shows de AEW.
"He estado escuchando cosas muy positivas de WBD. Les mencioné los ratings y los comentarios en Internet, y no les importa. Ni siquiera les afecta. El mensaje en Internet ni siquiera está afectando a estas personas, y ellos están en posiciones clave allí", dijo Zarian.
Por su parte, AEW y Tony Khan han llevado a cabo varios experimentos con buenos resultados. Con motivo del All Star Weekend de la NBA, la empresa cosechó un buen índice de audiencia con AEW Grand Slam Australia al ser emitido justo después de la cobertura del evento.
La semana pasada, AEW Collision fue dividido en dos partes de una hora de duración cada una para ser emitidas después de la cobertura del torneo masculino de la NCAA. A pesar de que los shows se emitieron fuera de su horario habitual, el empuje de audiencia del torneo de baloncesto les permitió establecer los mejores ratings en lo que llevamos de año.