Fuentes cercanas a PWInsider han confirmado esta tarde que Rusev, actualmente conocido como Miro en AEW, ha estado durante todo el día en la sede de WWE en Stamford, Connecticut. Varias personas dentro de la empresa lo han visto en las instalaciones, y todo apunta a que el regreso es un hecho: Rusev habría firmado un nuevo contrato con WWE y su presencia en las oficinas habría sido para preparar su vuelta a los cuadriláteros de la compañía.
Por ahora no se sabe cuándo volverá a aparecer frente a las cámaras, pero los motores ya están encendidos para su regreso a la acción. Un detalle que no pasó desapercibido es que CJ Perry, conocida por los fans como Lana, no estuvo con él durante la visita a las oficinas.
"El medio PWInsider.com ha confirmado a través de múltiples fuentes que Rusev (conocido en AEW como Miro) ha estado todo el día de hoy en la sede de WWE en Stamford, Connecticut, y ha sido visto por varias personas dentro de la empresa", ha confirmado Mike Johnson.
"Según las fuentes consultadas, Rusev ya habría firmado con la compañía y su visita a las oficinas fue para preparar su regreso. CJ Perry, también conocida como Lana, no lo acompañó en esta ocasión. Todavía no hay una fecha confirmada para su regreso en pantalla, pero ya está nuevamente en el radar de WWE".
Tras un paso irregular por AEW, donde su presencia fue esporádica y su push nunca terminó de consolidarse, Rusev vuelve a WWE en busca de redención y nuevos momentos gloriosos para sumar a su legado.
Rusev debutó en el roster principal de WWE en 2014 como una fuerza imparable, acompañado por Lana como su mánager. Su personaje de "el superatleta búlgaro" fue presentado como un antiamericano, lo que rápidamente lo convirtió en un rudo dominante. Tuvo una racha invicta durante meses, lo que lo llevó a ganar el Campeonato de los Estados Unidos, título que defendió con éxito en numerosas ocasiones hasta perderlo ante John Cena en WrestleMania 31.
Con el paso del tiempo, Rusev fue mostrando facetas más carismáticas y cómicas, sobre todo durante la etapa del fenómeno “Rusev Day”, que nació de forma orgánica con los fans y se convirtió en un éxito inesperado. A pesar del enorme apoyo del público, WWE no capitalizó del todo ese impulso, y Rusev fue perdiendo protagonismo en los años siguientes. Tras varios cambios de dirección creativa y storylines irregulares, fue liberado de su contrato en 2020.
