En el evento estelar de AEW Dynamite, The Opps (Samoa Joe y Katsuyori Shibata), acompañados por Powerhouse Hobbs quien sustituyó al lesionado Hook, lograron una importante victoria al derrotar a los Death Riders (Jon Moxley, Claudio Castagnoli y Wheeler Yuta) para convertirse en los nuevos Campeones Mundiales de Tríos.
Hobbs dominó a Yuta bajo los cánticos del público, mientras que Moxley y Claudio intentaban controlar a Shibata con castigos contundentes. La entrada de Samoa Joe cambió el curso del combate, arrollando a Wheeler con su característico poder, aunque Moxley intervino rápidamente para frenar su impulso. La situación se intensificó cuando Willow Nightingale apareció para evitar que Moxley utilizara una silla, lo que permitió a Joe retomar el control del combate.
Al mismo tiempo, The Young Bucks se acercaron a ringside, pero fueron sorprendidos por Swerve Strickland, quien los atacó con una Swerve Stomp, dejándolos fuera de combate. Mientras tanto, Marina Shafir y Willow Nightingale protagonizaron un intercambio de ataques en ringside. Hobbs, por su parte, destruyó a Yuta con un brutal spot contra la mesa de comentaristas. Finalmente, Samoa Joe aprovechó la confusión para aplicar la Coquina Clutch sobre Moxley, dejándolo inconsciente y sellando la victoria para su equipo.
Con esta victoria, Samoa Joe, Shibata y Hobbs se consagraron como los nuevos campeones, y la celebración no se hizo esperar, con Will Ospreay, Kevin Knight, AR Fox y otros luchadores uniéndose en el ring para festejar la conquista. De esta manera, The Opps marcan el inicio de una nueva era en la división de tríos de AEW, tras destronar a los Death Riders, quienes mantenían un reinado de 234 días.