Desde que abandonó WWE tras su combate con Shayna Baszler en SummerSlam 2023, Ronda Rousey ha permanecido alejada del foco mediático de la lucha libre. Sin embargo, con el evento Evolution 2 a la vuelta de la esquina, su nombre ha vuelto a sonar con fuerza.
Según ha señalado WrestleVotes en una reciente sesión de preguntas y respuestas, el regreso de Rousey es una posibilidad real, pero todavía no hay nada asegurado a corto plazo. “Es una moneda al aire. Volverá a WWE en algún momento, eso está claro, porque tiene una conexión directa con TKO. Pero no sé si será pronto”, declaró Joey Votes.
Esa conexión con TKO, la empresa matriz de WWE tras la fusión con UFC, hace pensar que Rousey sigue teniendo la puerta abierta, aunque la compañía no parece tener planes concretos para ella de cara a Evolution 2. A pesar de que se ha rumoreado que podría regresar acompañada de Shayna Baszler, no hay confirmación oficial ni pistas sólidas sobre su implicación en el Premium Live Event femenino que se celebrará en julio.
Ronda Rousey debutó en WWE en 2018 tras una exitosa carrera en UFC, convirtiéndose rápidamente en una de las figuras más destacadas del roster. En menos de un año, ganó el Campeonato Femenino de RAW y fue parte fundamental de la primera lucha femenina en cerrar un WrestleMania (WrestleMania 35), enfrentando a Becky Lynch y Charlotte Flair en un combate histórico. Su presencia trajo una gran atención mediática a la división femenina y ayudó a consolidar el estatus de las mujeres como evento principal en WWE.
Tras un parón prolongado, Rousey regresó en 2022, ganó el Royal Rumble y volvió a coronarse campeona, esta vez en la marca SmackDown. Aunque su segundo paso por la compañía fue más irregular y con menor protagonismo, siguió acumulando títulos y rivalidades.