Durante uno de los combates más esperados de AEW Grand Slam México, Místico logró una victoria por descalificación sobre MJF, en un enfrentamiento marcado por la polémica, la intervención externa y el apoyo incondicional del público mexicano al ídolo local.
La lucha comenzó con una entrada espectacular por parte de Místico, quien fue recibido por una Arena completamente encendida que coreó “Me muero” de La Quinta Estación. MJF, por su parte, apareció acompañado por The Hurt Syndicate, luciendo un atuendo con los colores de Estados Unidos. El mexicano dominó los primeros minutos con movimientos clásicos como arm drags y un Code Red, obligando a su rival a tomar distancia fuera del ring.
Sin embargo, la ventaja cambió rápidamente cuando Shelton Benjamin intervino en ringside, lo que permitió a MJF castigar brutalmente a su oponente, incluso intentando arrancarle la máscara. A pesar del daño, Místico reaccionó con un espectacular splash hacia fuera del ring y un Spanish Fly desde lo alto, provocando una gran ovación. MJF recurrió a todo tipo de artimañas, incluyendo escupitajos, piquetes a los ojos y un golpe bajo, buscando la victoria a cualquier costo.
El momento más controversial llegó cuando el mexicano aplicó La Mística y MJF se rindió, pero el árbitro estaba distraído por The Hurt Syndicate, lo que impidió validar la rendición. Acto seguido, MJF conectó otro golpe bajo, esta vez en presencia del árbitro, quien no tuvo más opción que decretar la descalificación a favor del enmascarado.
Tras la lucha, MJF y sus aliados atacaron sin piedad a Místico y llegando al extremo de quitarle la máscara y colocársela como burla, provocando la indignación del público. La situación no continuó escalando gracias a la aparición de Templario, Bandido y Titán, quienes junto a Speedball Mike Bailey y Kevin Knight, lograron expulsar a los agresores del ring.