Con el espacio aéreo de Qatar cerrado temporalmente debido al aumento de las tensiones en el Medio Oriente, varios empleados del equipo de producción de WWE que llegaron anticipadamente para el evento Night of Champions de este sábado en Arabia Saudí, se encuentran actualmente atrapados en el aeropuerto de Qatar.
La noticia fue dada a conocer por Bryan Alvarez de Wrestling Observer. Qatar, país que limita al sur con Arabia Saudí, decidió cerrar su espacio aéreo el lunes como medida de seguridad, tras recibir instrucciones de Estados Unidos y Reino Unido para que sus ciudadanos se resguardaran en el lugar hasta nuevo aviso.
El cierre aéreo ocurre tras una escalada militar durante el fin de semana: Estados Unidos bombardeó varios sitios nucleares en Irán y, como represalia, Irán lanzó el lunes un ataque con misiles contra una base militar estadounidense en Qatar. Afortunadamente, no se reportaron víctimas, pero las autoridades qataríes decidieron actuar con extrema precaución ante una posible escalada.
A pesar del contexto, WWE y TKO mantienen los planes para su evento premium en Riad, Arabia Saudí, este sábado. Monday Night Raw se celebrará esta noche desde Columbus, Ohio, y SmackDown está programado para emitirse desde Riad el viernes.
Hasta el momento, la empresa no ha emitido comentarios ni respondido a medios que preguntan si habrá modificaciones en la logística o en el cartel del evento debido a esta situación geopolítica delicada. Sin embargo, el medio WrestleVotes ha informado que personas dentro de la empresa han comenzado a pedir a WWE una reconsideración sobre celebrar el show en Arabia Saudí.
Como medida de precaución, países vecinos como Baréin, Irak y Kuwait anunciaron la suspensión inmediata del tráfico aéreo sobre sus territorios, lo que ha agravado las complicaciones logísticas en la región. Aunque se había informado también de un posible ataque a la base estadounidense Ain al-Assad en Irak, las autoridades locales desmintieron el suceso, aunque no descartaron posibles ofensivas en las próximas horas. Todo este escenario ha contribuido a que numerosos vuelos hayan quedado cancelados o en espera, atrapando temporalmente a varios empleados de WWE que se encontraban en tránsito hacia otros destinos tras su paso por Catar.
No es la primera vez que WWE se ve envuelta en una situación comprometida en Oriente Medio. En octubre de 2019, tras el evento WWE Crown Jewel celebrado en Arabia Saudí, más de 175 empleados, incluyendo superestrellas y personal técnico, quedaron retenidos en el aeropuerto de Riad durante casi 24 horas. Aunque WWE explicó oficialmente que se trataba de problemas mecánicos con el avión, múltiples reportes sugirieron que el incidente estuvo relacionado con tensiones financieras entre la compañía y las autoridades saudíes.
Según informaciones de medios como Fightful y Wrestling Observer, el retraso habría estado vinculado a una disputa económica por pagos pendientes del gobierno saudí a WWE por eventos anteriores. Incluso se llegó a especular que el propio Vince McMahon ordenó cortar la transmisión del show en Arabia hasta resolver el conflicto. Mientras tanto, algunas estrellas como Brock Lesnar y Hulk Hogan lograron salir del país en vuelos privados, lo que incrementó el malestar entre el resto del elenco, atrapado sin respuestas claras y en condiciones precarias durante horas.
