El presidente de TKO explica por qué Netflix no apostó por los eventos especiales de WWE en Estados Unidos

Tras el reciente acuerdo entre ESPN y WWE para emitir sus Premium Live Event sen Estados Unidos, muchos fanáticos se sorprendieron de que Netflix, poseedora de los derechos fuera del país, y la empresa de TKO no hubieran llegado a un acuerdo.

Sin embargo, hoy Mark Shapiro, presidente de TKO, ha comparecido en la conferencia para mostrar los resultados financieros del  holding en el segundo trimestre de este año. En su discurso, Shapiro ha explicado que Netflix, que actualmente cuenta con los derechos de transmisión de Monday Night Raw en EEUU, no presentó ninguna oferta para emitir los PLEs en ese territorio. "Son un gran socio fuera de Estados Unidos, pero esta vez no estuvieron en la conversación”, comentó Shapiro.

El presidente de CEO alabó la marca ESPN, destacando su prestigio y experiencia dentro del mundo de deporte. Shapiro destacó la confianza que tienen dentro del holding en ese acuerdo: “La propuesta de ESPN y la posibilidad de que nuestra audiencia se trasladara fue importante para nosotros… eso nos dio una firme confianza de que íbamos a poder construir sobre lo que ya tenemos.”

El acuerdo entre WWE y ESPN se podría calificar de histórico. La suma de dinero en la operación se traduce en unos 325 millones de dólares anuales que llegarían a las arcas de WWE, lo que prácticamente duplica los 180 millones anuales que ganaba en el anterior contrato. 

Así, WWE abandona su anterior acuerdo con Peacock. La empresa sale especialmente satisfecha de esta operación, no sólo por la evidente subida de ingresos, sino porque, tal y como confirmó el Director de Finanza de TKO,  Andrew Schleimer, WWE reduciría varios costes en la producción de sus eventos. 

Por la otra cara de la moneda se encuentran los propios fanáticos y espectadores, quienes con esta operación salen muy perjudicados. Hasta ahora, los fans podían acceder a eventos como WrestleMania, SummerSlam o Royal Rumble por tan solo 10,99 dólares al mes a través de Peacock. Pero con el salto a la nueva plataforma de ESPN, el precio se dispara a casi el triple sin ofrecer beneficios adicionales como descuentos por fidelidad o paquetes especiales. La suscripción se convierte en un lujo que muchos ya cuestionan.