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Las entradas de WrestleMania alcanzan su precio máximo histórico
En WrestleMania 41 los precios ya generaron polémica por sus elevados precios
WrestleMania 42 será más caro que nunca: primera fila por 70.000 dólares
WrestleMania 42 volverá a celebrarse en Las Vegas en 2026 y, aunque la expectación es máxima, los precios de las entradas han generado un enorme debate. Según informó el conocido fan Beard Guy, que ya asistió a WrestleMania 41, el paquete Ringside Row 1 tendrá un coste de 70.000 dólares por asiento para las dos noches del evento.
La subida es abismal en comparación con la edición anterior. En WrestleMania 41, celebrado también en el Allegiant Stadium, los asientos en primera fila costaron 50.000 dólares por persona, mientras que los de filas 2 y 3 rondaban entre 30.000 y 35.000. En cambio, para WrestleMania 42 se espera que los precios de las filas 2 y 3 oscilen entre 35.000 y 50.000 dólares.
La estrategia de precios no surge de la nada. En los últimos años, WWE ha experimentado un crecimiento histórico en sus ingresos gracias a los acuerdos millonarios con Netflix y ESPN. La llegada de Raw a Netflix en 2025 y la transmisión de los eventos premium en ESPN han colocado a la empresa en un nuevo nivel de exposición global y de estabilidad económica. Con estas alianzas, WWE no solo asegura ingresos garantizados por derechos televisivos, sino que también se siente respaldada para apostar por modelos de negocio más exclusivos en la venta de entradas.
Al inflar los precios de primera fila, la compañía parece querer replicar el modelo de espectáculos deportivos y conciertos de élite, donde el prestigio de estar en la zona más cercana al ring se convierte en un símbolo de estatus. Aunque este movimiento puede llenar las arcas de WWE a corto plazo, también abre la discusión sobre si la empresa está priorizando la exclusividad por encima de la accesibilidad de sus fans más fieles.
WrestleMania es sinónimo de momentos históricos, pero con cifras de este nivel muchos fans podrían optar por seguirlo desde casa. El objetivo de WWE parece ser reforzar la exclusividad de su mayor espectáculo, aunque existe el riesgo de alejar a una parte importante de su base de aficionados.
