En la más reciente edición de WWE SmackDown, Tiffany Stratton se enfrentó en un intenso combate contra Piper Niven. Donde la escocesa impuso su poderío desde el inicio, llevándola contra la esquina y derribándola con tackles y sentones. Tiffany intentó usar su agilidad para contrarrestar los ataques, pero Niven la sorprendió con un cannonball fuera del ring, estrellándola contra la barricada.
De regreso al cuadrilátero, Niven continuó castigando a la campeona con una llave de sumisión y un devastador clothesline. Stratton intentó reaccionar con varios clotheslines hasta derribar a su oponente, conectando un handspring corner splash y su característico Tiffy Stomp, aunque no consiguió la victoria, Niven no se quedó atrás y volvió a tomar el control con un slam que casi le da el triunfó.
En los momentos finales Piper intentó una Vader Bomb, pero Stratton la esquivó en el último segundo. Aprovechando la oportunidad, Tiffany subió a las cuerdas y ejecutó su Prettiest Moonsault Ever para lograr la cuenta de tres y llevarse la victoria.
Sin embargo, la celebración no duro mucho pues fue interrumpida por Charlotte Flair, quien atacó por sorpresa a Tiffany, enfocándose en su pierna izquierda. Flair aplicó su Figure Four Leglock, causando un enorme dolor a la campeona hasta que varios oficiales intervinieron para detener el castigo.