La campeona femenina de WWE, Bayley, ha dado muchos titulares a la prensa en una entrevista publicada en el podcast Insight with Chris Van Vliet. En otro extracto de la misma, la superestrella habló de su finisher, el The Rose Plant, un arm-trap headlock driver que utilizaba en sus días en la escena independiente, que ha generado reacciones mixtas desde su regreso a televisión.
Cuando se le preguntó por qué cree que no ha conectado con el público, Bayley no se anduvo con rodeos: "No lo sé. Es difícil preparar el movimiento. A veces estoy ahí intentando ver cómo encajarlo y pienso: 'Esto es molesto. Este movimiento apesta'". Aun así, defendió que cuando logra ejecutarlo de forma fluida, el resultado es bastante impactante: “Cuando encuentro una forma suave de aplicarlo, sale muy bien”.
Todo el mundo odia mi finisher, ¿eh? Lo siento chicos”, comentó entre risas. “Era un movimiento que hacía en las independientes.
En cuanto a su antiguo movimiento final, el Bayley-to-Belly, explicó que simplemente ya no encaja con su personaje actual. “Era muy de caricatura”, declaró refiriéndose a su etapa anterior más amigable.
Bayley ha sido noticia en los últimos días después de quedar relegada de la cartelera de WrestleMania 41. Originalmente, estaba programada para ser parte de la lucha por equipos por el Campeonato femenino por parejas de WWE, pero presuntamente una decisión creativa la dejó fuera de los planes y Becky Lynch ocupó su lugar. Esta decisión ha provocado un cisma entre los fans de la luchadora.