Tetsuya Naito ha disputado su último combate en New Japan Pro-Wrestling, al menos por ahora. El líder de Los Ingobernables de Japón cerró su etapa con la empresa en Wrestling Dontaku, evento celebrado esta mañana en Fukuoka, junto a tres de sus compañeros más leales: BUSHI, Hiromu Takahashi y Shingo Takagi.
El cuarteto de Los Ingobernables de Japón consiguió la victoria sobre Taichi, Tomohiro Ishii, Taka Michinoku y Shota Umino, cuando Takagi cubrió a Michinoku. Pero más allá del resultado, lo que quedó fue la emoción. Tras la campana, los cuatro luchadores alzaron sus brazos juntos ante un público entregado, hicieron el característico saludo ingobernable mientras sonaba la música de Naito y, en un momento cargado de simbolismo, posaron por última vez en la rampa antes de retirarse.
Minutos más tarde, tras la defensa exitosa de Yota Tsuji por el Campeonato IWGP Global frente a Yuya Uemura, los cinco miembros de LIJ volvieron a escena. Tsuji tomó el micrófono y señaló que no sabía si el grupo seguiría existiendo como tal, pero aseguró que “siempre serán ingobernables y siempre estarán conectados".
Tetsuya Naito debutó en NJPW en 2005 como parte del sistema de Young Lions. Alcanzó el estatus de main eventer en 2014, pero su llegada al estrellato no estuvo exenta de obstáculos. En 2013, los fans votaron en contra de que su combate fuese el evento principal de Wrestle Kingdom 8. Sin embargo, un año después, su regreso tras una gira por CMLL marcó un antes y un después con la fundación de Los Ingobernables de Japón. Desde entonces, Naito se convirtió en uno de los pilares de NJPW, acumulando múltiples logros: dos reinados como campeón mundial Peso Pesado y seis como campeón IWGP Intercontinental.